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45 La exposición al plomo es la responsable por el 0.6% de las en - fermedades en el mundo. El plomo afecta múltiples sistemas del cuerpo incluyendo los sistemas neurológico, hematológico, gas - trointestinal, cardiovascular y renal. Aun con bajos niveles de ex - posición relativa se pueden causar serios daños neurológicos, en algunas ocasiones irreversibles. Se trata de un metal pesado tóxico que forma complejos con diferentes enzimas que afectan virtual - mente todo el proceso de la síntesis de la hemoglobina, además de influir en el metabolismo de las porfirinas. Altos niveles de plomo en el ser humano han sido relacionados a encefalopatías, ataques o retrasos mentales. El plomo está asociado con la disminución de la audición en los adultos mayores, además de que interfiere en el cerebro con la transmisión y el procesamiento de los sonidos. Los expertos coincidieron en que, incluso niveles en sangre consider - ados aceptables para los niños de Estados Unidos (menos de 10 mcg/dL) podrían ser no seguros y, por ello, han propuesto que el nuevo límite de plomo en sangre para los niños sea de 2 mcg/dL. Los retardantes de flama bromados (RFBs) son aditivos sintéticos usados principalmente como agentes ignífugos en aparatos eléctri- cos y electrodomésticos (como por ejemplo en las carcasas plásti - cas de los televisores). Las propiedades de algunos RFBs son típicas de los contaminantes orgánicos persistentes (son ubicuos, debido a que son lipofílicos y persistentes, se bioacumulan en los seres vivos y se biomagnifican). Particularmente algunos éteres bifenilos poli - bromados (PBDE’s-) y el hexabromo ciclododecano (HBCD) causan efectos nocivos a la salud. Una vez más, a propósito de sus reformas estructurales, el Esta - do mexicano, respaldando el interés particular privado de las em - presas involucradas en la llamada reforma de telecomunicaciones y beneficiadas con el paso de la señal analógica a la señal digital terrestre, ha colocado en una situación de grave riesgo ambiental y de salud al grueso de la población: habitantes de las 32 entidades federativas, las 16 delegaciones políticas del Distrito Federal y los dos mil 468 municipios del país. La reforma de telecomunicaciones impuso a las autoridades locales una serie de atribuciones y obliga- ciones sustanciales dentro del proceso que no fueron acompañadas de las condiciones prácticas, financieras e institucionales mínimas para su ejercicio y cumplimiento. Las instancias competentes en las entidades federativas y municipios no están capacitadas ni do - tadas de la infraestructura y los recursos económicos adecuados y suficientes para atender debidamente el problema de la disposición, tratamiento o confinamiento de los residuos que generarán los mi - llones de aparatos televisores desechados. Por si lo anterior fuera poco, el gobierno federal ha organizado el manejo de las televisiones analógicas de manera tardía y con un presupuesto insuficiente e inadecuado, siendo que miles de aparatos televisores han sido ya desmantelados informalmente.

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