Número 18
46 ma, para que la lombriz que esta atorada el cuello de totolito, se desprenda y salga por el pico. Pasados siete meses de vida, se juntan con las otras aves del corral, como gallinas o patos. Se les ali - menta básicamente con maíz. En este periodo suelen lastimarse entre ellos, pues pelean. La totola ya no les cuida, por lo que los guajolotes empiezan a extender sus alas y emiten ciertos sonidos específicos. Casi al cumplir el año, algunos presentan vellos en pecho co - cido como “escobetilla” (solo los machos) eso es indi - cativo que el pecho es grasoso; pero conforme pasa el tiempo y crecen los vellos, se va acumulando la carne. El guajolote negro es el más conocido, porque se reproduce rápido y es más resistente a las enferme - dades. Llega a pesar de 5 a 6 kilos. Los guajolotes de otros colores son muy delicados lo que dificulta su crianza “se chiquean, se empiezan a morir por el frío o le dan los corucos”. EL GUAJOLOTE EN LOS RITUALES Cuando se mata al animal, quien lo sacrifica tiene que comerse el corazón del guajolote “para que no sea culpable de su sacrificio, porque Dios lo mando para consumir.”
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